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La mañana de este lunes, en las afueras del municipio de Copiapó se reunieron locatarios que trabajan en las llamadas “Ferias de las pulgas” en la comuna, con la finalidad de poder exigir a la administración municipal, algunas medidas que los favorezcan en este escenario de emergencia sanitaria que se vive en Copiapó, me plena cuarentena.Rubén Aranguiz, presidente del Sindicato N7 de las Ferias de la Pulgas, el cual mencionó que en la jornada del este domingo, fueron desalojados desde sus puestos por parte de las autoridades de Salud, ya que no contaban con las respectivas autorizaciones para poder instalarse en cuarentena, ya que no contaban con un permiso regular.En esa situación se encontrarían cerca de 700 personas que les complica bastante, ya que las ventas diarias son su único sustento. Según explicó Aranguiz, los comerciantes saben y entienden en contexto de la emergencia sanitaria, pero que es mucho mayor la necesidad de tener con qué alimentar a sus respectivas familias, estando de acuerdo en poder cumplir con las restricciones de salir de sus hogares, pero se enfrentan a la problemática de con qué subsistir.
